Factores adicionales que incrementan el coste de una reforma

Factores adicionales que incrementan el coste de una reforma

En el momento de solicitar presupuesto para una reforma, los clientes tienen principalmente tres preocupaciones.

En primer lugar el precio que va a costar. En segundo lugar el tiempo de duración. Y en tercer lugar, como es lógico, la apariencia final en que va a quedar la vivienda una vez terminado el trabajo.

Si bien los dos últimos factores siempre podemos garantizarlos para satisfacción de nuestros clientes, el primero depende de dos elementos.

En primer lugar, el propio trabajo de la reforma. Los materiales a utilizar y las condiciones sobre las que se realiza el trabajo, son de gran importancia.

Sin embargo, si teóricamente tuviéramos la misma vivienda a reformar en dos ubicaciones distintas, es posible que el presupuesto sea diferente de una a otra. ¿Por qué sucede esto? Por la presencia de factores adicionales.

A la hora de ofrecer un presupuesto de reforma, los factores adicionales pueden suponer un incremento que hay que tener en cuenta a nivel económico. Estos son los más comunes, aunque lógicamente cada proyecto puede tener unos factores propios únicos:

Reformas complementarias necesarias

Reformas complementarias necesarias

Cuando iniciamos una reforma, muchas veces solo podemos asumir el trabajo a realizar según los elementos externos. Pero cuando abrimos una pared o levantamos un suelo, puede aparecer cualquier cosa.

Desde instalaciones previas que se desconocían hasta problemas estructurales que deben remediarse, ¡incluso la presencia de insectos y otros animales!

Ante situaciones de este tipo, debemos afrontar primero su solución, sabiendo que va a suponer un incremento del coste de la reforma. Lo peor es que es un coste imprevisto, por eso siempre recomendamos a los clientes tener presupuesto ahorrado para estas emergencias.

Accesibilidad a la vivienda

Accesibilidad a la vivienda

En una vivienda moderna no hay problemas de accesibilidad. Pero también es cierto que en estas viviendas pocas veces se solicita una reforma.

La mayoría de trabajos se realizan sobre viviendas antiguas, donde la accesibilidad no fue ninguna prioridad a la hora de su construcción.

Nos encontramos así con muchas viviendas que no tienen ascensor. Esto es un grave problema, sobre todo en lo referente a subir y bajar el material y los escombros, dado que no siempre se puede contar con elementos exteriores para ello. Además de que, inevitablemente también incrementan su coste.

Nuestros profesionales tienen que dedicar tiempo y energía para realizar ese trabajo, por lo que afecta al presupuesto total de la reforma.

En otros casos nos encontramos con problemas aún más graves, como unas escaleras estrechas que no permiten subir los materiales o la maquinaria.

Cuando sucede esto, debemos acogernos a grúas exteriores para poder hacer subir el material. En estos casos es necesario afrontar el pago del alquiler de la grúa y del premiso administrativo local, para poder ocupar la calle durante el espacio temporal necesario.

A ello hay que unir licencias de obras y alquiler de contenedores para escombros. En todos estos casos, el presupuesto de la reforma se ve afectado y es un coste que debemos tener en cuenta.