La mayoría de reformas de vivienda tienen entre sus objetivos la estética y la funcionalidad. Es decir, queremos una casa más acorde a nuestro estilo y que nos facilite el día a día.
Pero hay otros elementos a tener en cuenta en un hogar y uno de ellos es el de seguridad. Gracias a una reforma integral apropiada, puedes también ganar calidad en este sentido y contar con una casa más segura para ti y los tuyos.
Instalación de puertas blindadas
El primer elemento que debes reformar para reforzar la seguridad de tu casa es la puerta de entrada. Aquí tendremos que abordar diferentes trabajos dependiendo de si se vive en una vivienda unifamiliar o en un piso junto con más vecinos.
En el primer caso debemos actuar sobre la verja, cancela o el elemento que tengas como primer nivel de acceso a la zona exterior de la vivienda. El hierro suele ser el material más recomendable, por su resistencia y por las posibilidades de diseño que ofrece.
Escoge una solución que impida el acceso también por arriba, por ejemplo con una verja de hierro que tenga decoración superior. Además de ser estéticamente muy atractivo, dificulta a los intrusos pasar por encima de ella.
La puerta de la vivienda puede ser blindada. En la actualidad tenemos muchas opciones de materiales y acabados, que nos ofrecen tanto seguridad como diseño.
Mezcla normalmente madera con hierro y mayor resistencia que una puerta de entrada habitual. Sin embargo, no es la opción más segura.
Las puertas acorazadas son más recomendables en este sentido, con una fabricación en acero que integra además cerradura, pernios y cerrojos, a un nivel óptimo para dificultar al máximo la entrada de intrusos.
Ventanas de alta seguridad
También conocidas como ventanas antirrobo, estos desarrollos están pensados para ofrecer a los residentes protección en múltiples sentidos.
En términos de seguridad, obviamente, cuentan con los sistemas adecuados para evitar la entrada desde fuera de la vivienda, algo muy recomendable en casas unifamiliares.
Por descontado, también tiene los materiales apropiados para proteger el interior de las condiciones climatológicas exteriores, consiguiendo con ello un excelente aislamiento térmico y acústico, sin renunciar en ningún momento a la estética.
La domótica en el hogar
Destinar una partida económica a la instalación eléctrica del hogar en una reforma integral es muy importante también en términos de seguridad.
Si queremos mejorar en este sentido todo lo posible, escoge la domótica como solución complementaria a puertas y ventanas reforzadas.
La domótica nos ofrece la posibilidad de controlar y gestionar la seguridad de la vivienda de forma remota, con lo que siempre podremos vigilar nuestro inmueble frente a la acción de intrusos.
La tecnología actual permite muchas soluciones inalámbricas, pero la instalación eléctrica física debe ser realizada por profesionales cualificados, para que todo el sistema cuente siempre con la mejor conectividad posible.
En domótica podemos contar con cámaras de seguridad, sistema de iluminación eficiente y hasta electrodomésticos integrados en la red de gestión del hogar.
Combina esta solución con la instalación de un videoportero que te permita identificar a cualquier persona que se acerque a tu vivienda, para mejorar todo lo posible la seguridad de casa.