Mucha gente plantea que la transformación de una vivienda se puede hacer mediante una reforma integral o cambiando por completo estancias clave como una cocina o un cuarto de baño.
Por descontado, estas opciones nos pueden ofrecer la transformación que estamos buscando, dado que son decisivas en cualquier hogar, pero eso no significa que tengamos que elegirlas necesariamente para conseguir los resultados que buscamos.
Por ese motivo, hay reformas más sencillas, rápidas y económicas que podemos abordar y con las que conseguir cambiar la imagen de la vivienda de una forma notable. ¡Por eso te las recomendamos!
Se trata de la reforma de puertas y ventanas, que puedes abordar tanto conjuntamente como por separado, en función de tus necesidades. Te explicamos las ventajas que nos ofrece cada una de ellas.
Reforma de puertas
Paradójicamente las puertas de una casa (salvo la principal) rara vez están incluidas en una reforma. Sin embargo, suelen ser las que más presentan un diseño clásico, un rápido deterioro y opciones estéticas algo desfasadas.
Si descubres el amplio catálogo de posibilidades que tienes disponible con las puertas innovadoras que hay actualmente, seguro que encuentras modelos infinitamente superiores a lo que ahora mismo tienes en casa.
Las puertas se conforman de un conjunto de elementos que consiguen el resultado final impactante del que hablamos. Aquí incluimos por supuesto las manivelas, las bisagras y el marco, que pueden llegar a cambiar por completo el efecto estético de la reforma de puertas.
Además, también hay alternativas como las puertas correderas o la creación de puertas dobles, con las que incluso modificamos el tránsito en el hogar, haciendo la experiencia todavía más transformadora.
Entre los principales beneficios de este tipo de reformas tenemos que indicar que es de las más económicas y que las opciones de diseño son prácticamente infinitas. Por eso ayudan tanto a conseguir darle ese toque personal que puede faltarle a un hogar no reformado.
Reforma de ventanas
La reforma de ventanas es más habitual, aunque sobre todo en caso de rotura de alguna de ellas. Nosotros la recomendamos siempre que hayan ventanas antiguas en un hogar, porque los beneficios que pueden aprovecharse son numerosos.
Por ejemplo, tenemos la posibilidad de utilizar ventanas con mejores prestaciones en cuanto al aislamiento térmico y acústico, gracias a los materiales y a su disposición abatible, frente a la opción clásica corredera.
Por otro lado, las ventanas modernas actuales disfrutan de una estética que mezcla sofisticación y modernismo, para poder adaptarse a cualquier tipo de estancia e incluso mejorar considerablemente la decoración de ese hogar.
Si aprovechas estos trabajos para complementar con un servicio de pintura profesional, notarás un cambio notable en cualquier parte de la casa donde cuentes con tus nuevas ventanas.
Por supuesto, la recomendación es abordar ambas reformas al mismo tiempo. Los resultados de un hogar con puertas y ventanas cambiadas te sorprenderán, sin tener que modificar absolutamente nada más del inmueble.