El alisado de las paredes se considera algo completamente normal. En la práctica, casi todas las viviendas de obra nueva tienen las paredes alisadas, por lo que no es normalmente un problema del que preocuparse para los nuevos propietarios.
Sin embargo, la mayoría de casas antiguas presenta la situación contraria. Anteriormente las paredes lisas no eran nada frecuentes, salvo en ciertas empresas, lo que realmente no importaba para los propietarios. Hoy en día, sí que es algo importante.
Por ese motivo, el alisado de paredes es uno de los servicios más requeridos en una reforma de vivienda y desde TS Design coincidimos con muchos propietarios, en que es una de las mejores decisiones que pueden tomar.
El motivo de que aconsejemos el alisado de paredes no es meramente por un asunto de tendencia estética decorativa, sino porque en realidad ofrece muchas ventajas que todo propietario de vivienda puede aprovechar.
Un diseño más moderno y funcional
Las paredes lisas ofrecen un diseño mucho más moderno que las alternativas anteriores. Por ese motivo, es muy solicitado en reformas donde se quiere modernizar la vivienda.
Además, también es funcional. Se consigue con ellas un estilo rectilíneo de las estancias, mucho más fácil de completar a nivel decorativo, con lo que el conjunto visual de la vivienda es mucho más atractivo.
Revalorización del hogar con paredes lisas
Las paredes lisas son propias de las casas modernas, por lo que una vivienda antigua con paredes lisas consigue una automática revalorización.
Si estás pensando en alquilar o vender tu vivienda, esta es una inversión que se debe tener en cuenta. Si se realiza, es posible obtener una rentabilización mayor en la operación comercial con los nuevos inquilinos.
Sin embargo, si se decide prescindir de la inversión, tendremos que tener en cuenta que sí será previsto por los compradores, por lo que para ellos supondrá un gasto adicional, que podría afectar a la decisión final de compra o de alquiler.
Uniformidad en diseño
No hay nada mejor que tener una vivienda uniforme en diseño. Muchas veces invertimos para reformar estancias concretas, como el dormitorio o incluso el pasillo, pero descuidamos la uniformidad en las paredes.
Esto motiva que nunca consigamos el objetivo ideal a nivel de decoración. Por ese motivo, el alisado de paredes debería ser una de las primeras reformas en las que invertir.
¿Cuándo es recomendable obviar el alisado de paredes?
El alisado de paredes no siempre es útil. Podemos optar por prescindir de él en determinadas estancias, sobre todo exteriores.
En terrazas y jardines, sobre todo amplios y de viviendas unifamiliares, dejar las paredes originales es una buena idea. Aporta un estilo claramente mediterráneo y tradicional, que puede ser en conjunto ideal para ese espacio.
También es más llevadero, dado que aunque está en el exterior, la suciedad es mucho menos visible que en una pared lisa. Lo mismo sucede con cualquier golpe. Un aspecto funcional importante, si no queremos pasar los días manteniendo en perfectas condiciones nuestras paredes.