“Nos gustan los techos más altos”, “Que los techos parezcan más altos”, “Que los techos no pierdan altura”… Estas son algunas de las demandas que escuchamos más frecuentemente por parte de los clientes que solicitan una reforma en interiorismo.
¿Por qué se prefieren los techos más altos?
Lo cierto es que los techos más altos dan una sensación de mayor amplitud, con mayores posibilidades decorativas, hacen que los espacios parezcan menos comprimidos y por eso mismo una estancia con techos más altos resulta más confortable y relajante que un ambiente más constreñido. Parece que incluso se respira mejor.
A la mayoría de la gente le gusta percibir el aire y la luz que le rodea dentro de una estancia con la suficiente holgura y altura. Sin embargo, hay muchas casas que no cuentan con techos altos, pero a sus habitantes les gustaría tener esa sensación y poder sacarles más partido. En este artículo vamos a ofreceros unos consejos para que los techos de vuestra vivienda parezcan más altos.
Cómo aparentar unos techos más altos en nuestro hogar
En realidad, todos los consejos que os vamos a dar consisten en efectos visuales, en cambios de referencias y de relaciones del techo con otros elementos del interiorismo de vuestra vivienda.
- Instala un mobiliario bajo: este primer truco es una solución de interiorismo ideal para aquellas casas que no tienen unos techos demasiado altos pero sus dueños quieren ofrecer una mayor amplitud en sus estancias. Aparte de los colores o el estilo de los muebles, un factor que hay que tener en cuenta es su funcionalidad. Los muebles bajos, lógicamente, ofrecen una mayor distancia entre el mobiliario y el techo y contribuyen a dar la sensación de mayor altura que vamos buscando.
- Evita las lámparas que cuelgan del techo: si las lámparas iluminan la estancia bajando el plano iluminado restan altura y dan una impresión más comprimida. Si tienes unos techos bajos, es recomendable recurrir a focos empotrados o una lámpara de superficie.
- Pinta el techo en un tono de color más claro que las paredes: se trata de un truco clásico. Un techo claro produce un efecto de mayor iluminación, que se refuerza si lo combinamos con un suelo oscuro. ¡Pruébalo!
- Decora tus paredes con tiras verticales: las tiras verticales potencian la verticalidad de las dimensiones. Se trata de un efecto arquitectónico y decorativo recurrente que se utiliza por ejemplo en el diseño de rascacielos, para otorgar una sensación de mayor altura. Si te gusta el papel pintado para las paredes de tu casa, no lo dudes, utiliza uno decorado con tiras o rayas verticales y tu estancia tendrá una apariencia más esbelta.
- Ilumina el techo: una vez aprendido el truco anterior podemos ir aun más allá con esta efectiva solución de interiorismo, ya que un techo iluminado siempre parece más alto, hace un efecto de estiramiento. Podemos recurrir a iluminación perimetral o también a apliques en las paredes que apunten al techo para dar la sensación de tener unos techos más altos.
- Instala puertas que vayan desde el suelo hasta el techo: de esta forma rompes la referencia que habitualmente tenemos y esto contribuye a que la percepción del espacio sea diferente. Además, es una solución de interiorismo original y con mucho potencial decorativo.
- Cuelga los cuadros y otros elementos decorativos más altos de lo normal: de nuevo con este truco rompemos las relaciones que solemos establecer con los diferentes elementos del espacio y damos una apariencia de techos más altos, jugando con las dimensiones. Podemos colgar los cuadros más altos, poner las cortinas lo más arriba posible, instalar muebles altos…
Si necesitas abordar cualquier reforma de interiorismo y quieres conseguir un efecto de techos más altos en tu vivienda, contacta con nosotros. Estamos a tu disposición para asesorarte en lo que necesites.